martes, 30 de julio de 2019

La primera en la frente

1 comentarios
 
Pasados unos días ya del debut europeo del RCDE Stadium, he de decir lo siguiente: fue un buen día. Tras la jornada laboral, el jueves de San Jaime nos trajo un regalo que esperábamos todos desde hacía tiempo. Un partido al que llegamos al descanso un poco dubitativos en lo que concierne al resultado, y que acabó de forma frenética con un 4-0 que nos dejó a todos exhaustos. El Stjarnan FC plantó el autobús y se defendió de forma brillante. Aunque, claro está, el cansancio y la diferencia de calidad de ambos equipos hizo mella y finalmente se vio reflejado en el luminoso.

Tuve el placer de poder presenciar el partido desde el palco presidencial del estadio. El RCD Espanyol invitó a la junta de la Federació Catalana de Penyes a vivirlo por todo lo alto. Con lo que conlleva eso, sus pros y sus contras: ir bien vestido, no llevar bufanda, comportarse de forma sosegada, tener a tu disposición bebida y comida durante el descanso... Y el punto de vista. Hay que reconocer que, si bien el fútbol se ve bien desde cualquier asiento del estadio, desde la zona presidencial es sencillamente espectacular.

Con el 4-0 nos fuimos todos muy contentos y yo, que tenía el viaje a Islandia medio encarrilado, pensaba en poder rematar la jugada y meter gol. Pues bien, dejé pasar el centro, que iba envenenado, y la ocasión manifiesta de gol acabó en un ¡uy!

Me hacía una ilusión tremenda viajar a Islandia, visitar mínimamente un país que desconozco, ver al equipo en el extranjero... Pero finalmente he tenido que desistir. El primer desplazamiento tendrá que esperar, aunque sea como mínimo una semana.

La idea encajaba a la perfección: cogía fiesta del trabajo el miércoles y el jueves. El miércoles 31, es decir, mañana, viajaba a Reikiavik en el avión chárter del club, con los jugadores, directivos, miembros del staff, prensa... Llegábamos a mediodía, y tenía toda la tarde para hacer turismo. El hotel me esperaba para dormir y desayunar ya el jueves, día que también tendría libre para visitar la ciudad hasta ya entrada la tarde, cuando a las 19:15h (hora islandesa) comenzaría el Stjarnan-RCDE. Vería el partido, y volvería a coger el chárter del club nada más acabar el encuentro. Al llegar a Barcelona, ya el viernes de madrugada, iría a trabajar prácticamente sin pasar por casa.

Aunque el viaje tenía una pinta genial, y más viviendo la experiencia de viajar en la expedición oficial periquita, el precio final acabó siendo de escándalo, nada que ver con el que en un principio se comentaba. Y tuve que descartar el viaje. A veces hay que hacer locuras, pero otras veces no.

Así, sin más, me quedo sin un primer viaje que quería hacer. Confío que pasado mañana el Espanyol haga su trabajo, se clasifique para la siguiente ronda, y esta vez sí, el jueves 8 de agosto, pueda estar bien en Suiza bien en las Islas Feroe, viendo a los blanquiazules jugar mientras disfruto de otro país que nunca he pisado.

One Response so far.

  1. Jaime says:

    Y yo también hijo , yo también ,